La posición estratégica, ¡coño!

Andamos metidos en discusiones vagas sobre la conveniencia o no del ‘Devora’ en la capital burgalesa. Mientras no nos diferenciemos con algo radical, difícil será competir con la gastronomía de nuestros alrededores, y en general de España. Hay mucho nivel en casi todas partes. Tengo para mí, y quisiera equivocarme, que la mayoría del movimiento que generó el Devora en anteriores convocatorias sirvió para que los burgaleses salieran a comer fuera de casa y quizá a invitar a algún amigo o pariente de lugares cercanos.
Desde hace un montón de años, a cada persona que venía a Burgos -a mí también me ocurrió- se le insistía en que lo importante de esta provincia era su posición estratégica. Un tema que, sin embargo, han hecho valer solamente unos pocos, y no precisamente políticos que son los que nos han olvidado en las infraestructuras: se les debió acabar el presupuesto público al finalizar la A1 entre Burgos y Madrid.
Así, poco a poco, vamos perdiendo nuestra capacidad logística, pese al empeño, por ejemplo, de la Cámara de Comercio con la defensa del corredor atlántico tanto para viajeros como para mercancías, tan importante y necesario en nuestra conexión con Europa.
Es inconcebible el parón que la alta velocidad está generando en Burgos, mes tras mes sigue si haber fecha de llegada del tan soñado AVE y menos del proyecto entre Burgos y Vitoria. También se han olvidado del tren directo entre Burgos y Madrid, pasando por Aranda de Duero, que ni para personas, ni para mercancías tiene futuro según algunas administraciones; cuando precisamente conocemos la importancia que el ferrocarril cuenta para el tranporte en todos los países, y lo bien que vendría para la logística burgalesa recuperar esa vía, una vez perdida por la alta velocidad la línea más corta entre la capital y nuestra tierra.
Pero el paso de tortuga es también firme en la conexión con La Rioja y con Cantabria. Y la N1 sigue con parches mientras en la AP1 se circula con aparente tranquilidad, siempre pagando. En este mundo, donde las grandes industrias lo que piden es logística y que su producto se dirija raudo y veloz hacia los puntos de distribución y venta, estamos perdiendo ritmo y competitividad con la repercusión que puede tener para nuestra política industrial.
Burgos no atraerá todos los turistas que nos gustaría en verano, y mayoritariamente serán de paso por mucho que algunos se empeñen en intentar lo contrario. Hace frío. Más que conseguir que la gente que venga duerma más, tendríamos que intentar que vengan más y subir así las cifras de ingresos y de visitantes.
Por eso, nuestra capacidad industrial, la que nos llevó a autocomplacernos como capital industria de Castilla y León sigue siendo básica y fundamental para el futuro de nuestra provincia. Que lo importante es la posición estratégica ¡coño!

Columna publicada en Diario de Burgos el 6 de marzo

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...