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Sueños por delante

Quizá este verano que afrontamos sea uno de los más austeros de los últimos años. Posiblemente entre sus familiares más cercanos se encuentren personas recién desempleadas o jóvenes que buscan desesperadamente un primer empleo. Estos últimos es probable que ya estén preparando su salida de España en busca de un trabajo en otros países de la Unión Europea o al otro lado del Atlántico, bien sea en Norteamérica o en algunos territorios pujantes de Sudamérica, aunque no será lo común.

Algo que muchas familias castellanas conocían desde tiempos inmemoriales, que no se debe gastar más de lo que se tiene, se truncó en tiempos de bonanza y son miles de personas las que llegan a fin de mes con lo justo, si llegan. Los salarios se encuentran a la baja y recortándose y no son pocos los que aseguran ya sin temor a equivocarse que también habrá despidos entre los funcionarios, aunque no especifican qué tipo de ellos. Porque funcionarios pueden entenderse también a los laborales, y esos hace tiempo que perdieron su seguridad; los centenares y miles de asesores que todavía, a pesar de los pesares, pululan por numerosas administraciones, y deberían explicarme para que valen; los de la ventanilla de toda la vida, o los bomberos, policías, médicos, enfermeras y profesores o maestros. A todos se les incluye en el mismo saco y evidentemente no todos realizan el mismo trabajo.

Este verano, sin embargo, se atisba que será diferente. Si realmente suben el IVA a algunos productos como amenazan. Si a pesar de la temporalidad no mejoran las cifras de empleo. Si no recuperamos ciertas dosis de optimismo, no nos salva casi nadie. Conversando con Eudald Carbonell en la magnífica terraza del Fórum Evolución tras grabar una entrevista en el Museo de la Evolución para un programa de TVE este confesaba que después de sus estudios universitarios en París, y aunque tenía ofertas laborales en la capital francesa, optó por regresar a nuestro país para contribuir a sacarlo adelante. Eran unos convulsos años setenta y en España se necesitaban muchas manos.  Su afán por participar en un cambio necesario no lo truncaron ni los siete años que estuvo en paro, ni las dificultades para sacar adelante sus proyectos, que luego se convertirían en una cátedra, un instituto de investigación o todo lo que ofrece Atapuerca y su entorno en la actualidad. Sueños que se cumplieron. Y hablábamos si ahora los jóvenes veinteañeros o treintañeros conservan esos sueños o no se creen que España va camino de convertirse en un país empobrecido por el talento poco aprovechado, por los dispendios gastados y por la falta de recursos. Saben, lo que nos hemos gastado en el MEH con los impuestos, viene a suponer solo 10 kilómetros de autovía o 5 kilómetros de AVE, y pienso que las infraestructuras son necesarias, pero no hemos asumido su real coste hasta que no ha habido dinero para construir nuevos tramos.

Evidentemente, la crisis parece aparentemente que nos ha enseñado a vivir de forma diferente, a gastar con mesura, a comparar precios, a que lo que usamos perdure más tiempo y a dejar de presumir de coche –que hasta el Focus tiene su toque-,  y a saber que a final de mes la nómina se reduce; pero no ha logrado todavía convertirnos en emprendedores, animarnos a emigrar y a ponernos el mundo por montera. Llevamos decenas de años bastante cómodos y cualquier excusa nos sirve para no levantarnos de nuestros sillones ahora que nuestros líderes han demostrado que no solo depende de ellos el futuro de todos.

20 años con Miguelón

De vez en cuando, cuando uno dispone de tiempo, le entra la pasión por el orden, que habitualmente abandonamos en la vorágine laboral. Ocupado de esas labores todavía se guardan en carpetas o en cajas, como proponen las películas norteamericanas, las fotografías que te llenan de recuerdos. Algunas son del álbum familiar, otras del profesional. Entre estas últimas me encontré una en la que estaba paseando por la calle Uría de Oviedo con los tres codirectores de los yacimientos de Atapuerca, hace ahora quince años, un día antes de que recibieran junto a Emiliano Aguirre y en nombre de todo el equipo del Premio Príncipe de Asturias. Quizá por mi condición de asturiano y también de periodista en Diario de Burgos la organización me invitó al evento. Escribí la crónica y disfruté de todos los instantes, uno de ellos cuando suena el himno con el sonido de decenas de gaitas. Les confieso que pone la carne de gallina a cualquier gijonés.

Allí estaban, en el Campoamor, el ABC de nuestra ciencia de Atapuerca: Arsuaga, Bermúdez y Carbonell. Cinco años antes, en el verano de 2002, habían hallado uno de los cráneos mejor conservados del registro fósil mundial, el número 5 de la Sima de los Huesos, ese año Miguel Induráin había ganado su primer Giro y su segundo Tour, y  nuestros arqueólogos aficionados al ciclismo aprovechaban el ligero momento de la siesta para observar las hazañas del rey de este deporte. Y los fósiles tienen también nombre de reyes, así que el cráneo se convirtió en Miguelón y con el convivimos desde hace 20 años. En 2004, en Gran  Dolina, el hallazgo fue de unos dientes que aventuraron más fósiles de una nueva especie, Antecessor, Exploradores, título del libro que acaba de publicar Bermúdez de Castro y que su mera lectura te incorpora a la apasionante aventura de la historia, de una forma amena y científica, que no es incompatible, por cierto. Conoces de primera mano los hallazgos fundamentales de la sierra de Atapuerca intercalados con anécdotas divertidas (el Halcón Milenario era el nombre del viejo Land Rover de Carbonell que permitía a los paleontólogos subir por la sierra) y  datos empíricos.

Miguelón me ha acompañado en mi trabajo de periodista, unas veces más de cerca, otra de forma lejana, a lo largo de estos veinte años, con otro rey, el del rock, y su pelvis, Elvis, o el bifaz Excalibur, tres de las piezas fundamentales encontradas en este yacimiento burgalés y cuyos originales se exhiben de forma excepcional en el Museo de la Evolución Humana. Miguelón es un emblema, casi una marca, y por qué no podría también ser elegido como el mejor embajador de esta ciudad. Su nombre ha recorrido medio mundo y ahora incluso navega con cierto éxito por las redes sociales. Los fósiles de su extirpe, miles, encontrados en la Sima de los Huesos que han sido adjudicados al Homo heidelbergensis, podrían incluso por estudios recientes pertenecer a otro linaje además del que dio origen a los neandertales en Pleistoceno Superior, lo que añadiría, aún dos décadas después, más importancia a este descubrimiento.

A estas conclusiones han llegado tanto Bermúdez de Castro como María Martinón, después de estudiar de forma detallada, junto a sus colegas del Grupo de Antropología Dental, más de 500 dientes fósiles hallados en la Sima de los Huesos y avalado su estudio en la revista Journal of Human Evolution. Y es que algo que ha sido característico a lo largo de estos años ha sido que el trabajo desarrollado en Atapuerca ha sido acreditado por las más prestigiosas revistas científicas del mundo.

Cabe que para aquellos que vivimos en el mismo territorio donde se encuentran estos hallazgos excepcionales puede que la abundancia de información nos haga infravalorar los mismos, o quizá pensar que se nos va la mano a la hora de su valoración, o que no es para tanto y todo forma parte de una campaña de markéting. Pero les puede asegurar, porque así lo he constatado, que si los responsables del Museo de Historia Natural  de Nueva York contaran con algunos de los fósiles de heidelbergensis o antecessor que presenta el MEH los tendrían entre su vitrinas más preciadas. Y si en cualquier yacimiento europeo hubieran descubierto un 5 por ciento de lo hallado en Atapuerca estarían encantados el resto de sus días.

Y no se crean, que de Miguelón también se aprende, su especie no era caníbal como sus ancestros, sino solidario con sus congéneres. La historia de Benjamina, de Elvis, o la suya propia, que sobrevivió bastante magullado y con un fuerte infección durante algunos  años, indica que le ayudaron a no morir. Algunos han bautizado a esta tribu como la primera ONG de la historia. Nos indicaron el camino hace más de medio millón de años.

Por si quieren seguir a Miguelón en las redes su cuenta de twitter es @MiguelonMEH

Columna publicada en DB el 21 de mayo de 2012

Para qué sirven las redes sociales

Sábado al mediodía, quedo para almorzar con algunos de los asistentes al Congreso Iberoamericano de Redes Sociales iRedes. Tanto habían disfrutado de la hospitalidad de la ciudad de Burgos que habían decidido prorrogar el fin de semana en esta tierra. Acudimos a un restaurante cercano a la Catedral, enseguida uno de mis acompañantes abrió el iphone, la aplicación de Foursquare y vio lo que algunos de los usuarios opinaban sobre el lugar. Recomendaban la confitura de pato. Pinchó en la red social y se convirtió en un visitante más, espero que haya recomendado el lugar porque el cordero estaba impecable . Por curiosidad, entré en esta red y vi  las recomendaciones que hacían para diversos lugares de la ciudad de Burgos. Entré en el Museo de la Evolución y comprobé que 237 personas diferentes habían hecho chek-in, y 18 de ellos habían dejado su opinión, casi todas positivas, agradecí conocer la crítica, sobre la falta de entradas, pero había sido hace año y medio en el inicio del Museo, cuando nuestra organización la estábamos poniendo en marcha.

Continué comprobando algunas de las cuentas en redes sociales del MEH y habían crecido en estos últimos días con motivo de diferentes visitas que habíamos tenido. Jesús Calleja, en su cuenta de twitter, @desafiocalleja,  había recomendado su visita al Museo, y decenas de sus  seguidores habían retuiteado los 140 caracteres; el mismo día @Ristomejide había comenzado a seguir la cuenta @MiguelonMEH ,  cuenta con 720.000 seguidores en la red del pajarito, por lo que a buen seguro  servirá de impulso.

Mientras tanto en el Congreso  @motorbafer y @autobafer nos informan a través también de twitter dónde están algunos de los ponentes de iRedes, que han tenido que ir a recoger, como Marta Fernández, @mrtfernandez, la presentadora de Cuatro que se ha subido al coche oficial del evento al terminar su programa para poder llegar a tiempo a Burgos. Volverá otro fin de semana a conocer los yacimientos de Atapuerca. En estos dos días, además, @teloacerco ha tenido un detalle con los conferenciantes y se lo agradecen a través de las redes sociales.

Si alguno de los congresistas o cualquier ciudadano quiere ver las fotos del Congreso, no tiene más que acudir a Flickr para disfrutar de las imágenes de Victoriano Izquierdo, o también acudir a su cuenta de Instagram.

Saben, según la segunda versión del mapa de redes sociales que puden ver en www.iredes.es, 60 millones de personas siguen la red canadiense de fotos Flickr, 14 millones Instagram, 15 millones Foursquare, 13 millones la española Tuenti, 22 millones la red de blogs Tumblr, 800 millones Facebook, 500 millones Twitter, 135 millones Linkedin, una red que está creciendo exponencialmente en tiempos de crisis, utilizada por muchos responsables de personal de empresas para buscar candidatos, 15 millones tiene la sueca Spotify para escuchar la música que quieras. 490  millones buscan sus vídeos preferidos en Youtube, y en turismo en España hay que estar en Tripadvisor, una red con 45 millones de usuarios, o Minube, con 120.000. Las redes se multiplican a la vez que sus usuarios.

Hay muchas personas que ya en lugar del todopoderoso Google utilizan las redes como motor de búsquedas, como señaló el empresario digital Martin Varsavsky @martinvars en el inicio del Congreso. También él comentó en su intervención cómo usaba las redes, la pueden ver en Youtube .

Saben lo mejor de todo, que se puede hacer con un pequeño aparatejo que cabe en la palma de la mano, eso que llaman smarthpone.  @LeoHarlem fue el encargado de finalizar el Congreso iRedes con un monólogo sobre para qué sirven las redes sociales. También pueden echarle un vistazo en youtube,  y terminar este artículo con una sonrisa.

Columna publicada en Diario de Burgos el 26 de marzo de 2012

Campus de Excelencia Internacional

En plena competencia entre todos los sectores y una crisis económica galopante que ha llevado al paro a cinco millones de personas, muchos todavía se preguntan el papel de las Universidades en todo el proceso formativo y sobre todo en la preparación de los jóvenes para el desarrollo de nuevos empleos de acuerdo al futuro de nuestra sociedad.
Parece que la reciente aprobación del Campus de Excelencia Internacional, en la que la Universidad de Burgos se suma con Valladolid y León bajo el título «Los horizontes del hombre» a una propuesta diversa y alternativa cara a la sociedad del futuro, marcará definitivamente los rasgos del centro educativo burgalés, donde la UBU puede ser no solo referente nacional, sino internacional, a poco que promocione la enseñanza bilingüe -para ello cabe desarrollar programas para la actualización de profesores en diferentes materias- y la práctica.
Evolución Humana, Envejecimiento y Ecomovilidad son las tres bases que sustentan el proyecto del Campus. En cuanto a la Evolución Humana se desea contribuir a la búsqueda de respuestas a la pregunta ¿qué nos hizo humanos? Esta cuestión no sólo tiene connotaciones filosóficas, sino que muchas de sus respuestas son fundamentales para conocer la capacidad de adaptación del hombre al medio que le rodea y los efectos evolutivos de las poblaciones actuales, incidiendo así en numerosos aspectos de la salud y el bienestar de la sociedad.
Por ese camino se ha iniciado también el Máster en Evolución, dirigido por un científico y divulgador de reconocido prestigio, como es Juan Luis Arsuaga, se ha puesto en marcha la televisión de la UBU, con gran acierto en sus primeras semanas, y que ayudará a difundir el trabajo que allí se realiza; mientras, la OTRI, con un presupuesto muy ajustado, intenta en la situación económica actual acercar más las empresas a los alumnos, y la Universidad a la sociedad, un punto clave si queremos no solo obtener estudiantes preparados sino con una orientación laboral hacia los empleos de futuro.
Evidentemente hay puntos negativos, ni todo el profesorado tiene el mismo nivel, y la universidad suele ser un lugar donde el que quiere pasar inadvertido puede. Aunque este equipo rectoral lo ha intentado, no será fácil que los profesores con dedicación exclusiva, realmente se dediquen en exclusiva a la UBU, o donde se exija que todos los docentes sean doctores, o al menos la mayor parte, y un mínimo de investigación y publicaciones. Pero tiene muchos más positivos en el refuerzo de una identidad que parecía perdida, y una oferta, que aunque no completa, sabe hacia dónde camina. La UBU, que todos pagamos, también es parte de todos. Podemos exigir y participar. Y el futuro de este país pasa, sin duda, por la educación, desde la infantil hasta la universitaria, en unos años precisamente que están creciendo las solicitudes de matrículas debido al oscuro porvenir laboral de nuestros jóvenes.

Una ciudad, un proyecto común

Si hay un hecho que se ha producido este fin de semana, pese al tiempo inestable, ha sido el apoyo contundente y decidido de miles de vecinos burgaleses a la candidatura de Burgos a la capital cultural europea en 2016. El viernes más de quinientos pequeños, estudiantes del colegio Jesuitas, desfilaron por el Paseo de la Sierra de Atapuerca, frente al Museo de la Evolución, para con sus disfraces y su sonrisa decir que ellos querían, que dentro de cinco años, cuando algunos fueran ya adolescentes con pecas, vivir en una ciudad que fuera el referente cultural de Europa.

El sábado por la tarde, en el mismo escenario, el protagonista fue el balón de baloncesto de la mano de un club Autocid Burgos, que ha devuelto la autoestima ciudadana y que derrocha ilusión y entusiasmo en todas sus actividades. Ojalá ascienda a la ACB porque Burgos necesita ese espíritu de lucha y emprendedor, el rival ahora es Girona, y luego nos quedará la final, pero el trabajo realizado de la mano de patronos, técnicos y jugadores ha sido brillante. Las seis mil personas que se acercaron a botar lo hicieron plenas de entusiasmo, el mismo que derrocharon los también miles que se subieron a pedalear el domingo por la mañana, que llegó con sol, también para apoyar Burgos 2016, en este caso la marea azul se cambió por la roja, pero con otro fin más pleno, el de Proyecto Hombre, que busca sacar del infierno de la droga a los que se han deslizado por el mismo.

Son tres ejemplos, que se sumarán al de la Noche Blanca, el próximo 28 de mayo, y que también si el tiempo no lo impide sacará a la ciudad a la calle, en las horas previas a la visita del jurado que decidirá cuál de las capitales finalistas en España será la que en 2016 represente, junto a la polaca, a la Europa cultural y milenaria, pero también de presente y de futuro. El 29 de junio, precisamente en la fiesta de San Pedro y San Pablo, se dará a conocer el fallo. Aseguran que San Sebastián y Córdoba son las que pugnarán con Burgos por la nominación definitiva, y que las dos primeras tienen más posibilidades que la ciudad castellana. Quizá sea así o quizá no; pero lo importante, es que aunque con las reticencias de muchos de los que ahora se han sumado a la candidatura (no los tres ejemplos citados anteriormente), Burgos 2016 ha devuelto el orgullo y la autoestima de una ciudad que en muchos aspectos es ejemplar y emprendedora, y sea cual sea el resultado, habrá demostrado que juntos podemos y que somos capaces de aunar intereses en pos de conseguir objetivos comunes en beneficio de todos.

Turismo, más y mejor

No es de extrañar que el debate sobre el turismo y su promoción fluya estos últimos meses en la provincia de Burgos. De hecho, este sector alcanza el 10 por ciento del PIB en Castilla y León, y en la situación económica que nos encontramos busca convertirse en un importante yacimiento de empleo. Además, en Burgos, la apertura del Museo de la Evolución Humana, supone una marca más que añadir para el impulso del mismo y da origen más si cabe a la controversia. Ocurre, sin embargo, que con el turismo parece deslizarse lo mismo que con el fútbol. A todos nos da por opinar sobre la promoción, la ciudad de los Congresos, las pernoctaciones, lo caro o barato de los hoteles, y pocos se sienten aludidos para profundizar en aquello que pueden y deben mejorar, desde los agentes implicados a los propios ciudadanos.

Hay quien ve la botella medio vacía (suelen ser los más, en este país ganan los pesimistas), otros medio llena. No sé si en el caso de los datos de turismo que afloran mensualmente preferiríamos menos visitas y más pernoctaciones, o más visitas y menos pernoctaciones. Si en vez de un millón de visitantes contáramos con dos millones, aunque se quedaran 1,6 días en la provincia de Burgos creo que nos daríamos por satisfechos, y no mantener un millón que se quedan 2,5 días. Lo mejor, claro, y a lo que todos aspiramos: los dos millones, 2,5 días entre nosotros.

Por comentar una cifra, Bilbao en 2010 tuvo 684.000 viajeros, muy por debajo del 1.028.259 con que contó Burgos y 1.281.521 pernoctaciones frente al 1.670.805 que tuvo Burgos. Y todavía son muchos a los que escucho que ojalá tuviésemos un Guggenheim olvidándose que para única la Catedral de Burgos. Sí es verdad que el Museo bilbaíno gozó de la presencia de 30.000 visitantes esta pasada Semana Santa, ganando por distancia al Museo de la Evolución burgalés y a la propia Catedral de Burgos más dedicada en esas fechas a los cultos propios que a las visitas turísticas. Pero Bilbao sí atrae mucho turista extranjero, procedentes sobre todo de Francia, Alemania y Reino Unido, además de un porcentaje importante de norteamericanos (por cierto en el Museo tendré ocasión de atender el sábado a una tour-operadora neoyorkina que espero disfrute de Burgos), que sí que nos interesaría que siguieran su ruta hacia Burgos en su entrada por España. De ahí que Bilbao nos afecte, al igual que Madrid o Barcelona, no solo para su población, sino para los millones de visitantes que tienen, que en el caso de la capital catalana alcanzan los 5 millones.

No debemos conformarnos con el que quien no llora no mama, porque si la competitividad empresarial con nuestro entorno es grande, en tiempos de bonanza y de crisis, en el caso del turismo la competencia es feroz, tremenda. No es momento para las lágrimas. Cada territorio, cada provincia, y hasta cada localidad, han visto en el potencial turístico que tiene España un nicho de mercado. Porque nuestro país, nuestra marca, es todavía uno de los primeros países en atraer viajeros, por detrás del coloso francés que vive del mítico París, de la Costa Azul, o de los castillos del Loira.

Ocurre, sin embargo, que en Francia las cadenas hoteleras sí han apostado por el turismo familiar, y muchas de ellas (no se trata de hacer publicidad) alquilan habitaciones por una noche donde una familia con dos hijos puede dormir por 40 ó 45 euros. Con lo que una semana viajando por aquel país podría costar unos 300 euros. En Burgos, en cambio, que es una de las provincias donde los precios de hoteles están más bajos y la calidad más alta, una semana, a una familia con dos hijos en dos habitaciones, el gasto le puede suponer 700 euros, más del doble que el modelo anterior, y eso solo en dormir.

Siento discrepar con las grandes cifras que se están manejando para Burgos si aspira a la Capitalidad Cultural Europea. Las grandes batallas se vencen en las pequeñas escaramuzas. Y de esas tenemos todos los días y habrá que ganarlas nos elijan o no para ser capital de 2016. Todavía hay millones de españoles que desconocen lo que puede ofrecer la provincia de Burgos, desde todas las aristas del prisma. Y millones de europeos que pueden encontrarse en esta tierra como en su casa.

Por otra parte, existen también miles de personas que viajan a través del ferrocarril y el avión;  del primero, parece que en Burgos nos hemos olvidado, y no solo por la distancia que debemos andar para llegar a la estación, sino por la poca frecuencia de sus servicios. Y del avión nos ocupamos más en enviar gente fuera que en traerla: los transportes, mejorables, sin duda.

Lo estamos haciendo, pero nos falta explotar lo excepcional que supone en muchos aspectos la provincia de Burgos. Más nos ocupamos de su patrimonio y de su uso, que del turismo en sí. Trabajo en el MEH y estoy rodeado de unos fósiles únicos en el mundo, que se intentan conservar a la temperatura y la luz requerida, pero soy consciente de que mi ocupación en el Museo se juzgará más por el número de turistas que atraiga, que por la imagen que del mismo se lleven los visitantes o la comunidad científica (aunque lo segundo logrará el aumento de lo primero). Porque es cierto que la inversión ha sido alta en todo el complejo de la Evolución Humana y ello ha de repercutir en beneficios para la propia ciudad y provincia.

Pero no solamente nos hacen excelentes y diferentes la Catedral y el Museo (que tengo mis dudas sobre la bondad o no de una entrada común, sí estoy seguro, en cambio, de que debe haber una venta global de la capital y la provincia), sino también lugares como la Cartuja o Las Huelgas, en la propia capital; o los yacimientos de Atapeurca, el Camino de Santiago, el Monasterio de Silos, las icnitas de Salas y Frías, por poner cuatro ejemplos de la provincia que también nos convierten en óptimos.

No hace muchos días, un amigo me comentó que basa sus viajes al extranjero con su familia buscando el Patrimonio de la Humanidad, y que encuentra grandes carteles en autopistas que le indican que está cerca de algún lugar con este reconocimiento. No estaría mal que en Burgos, donde sumamos tres y podemos alcanzar cuatro o cinco, si seguimos insistiendo en el Románico del Norte, en las huellas de los dinosaurios o en el casco histórico, también se señalen no solo en las circunvalaciones, sino en la distancia, para los que vengan o para que vuelvan los que pasan.

En Burgos podemos trabajar aún más por sumar esas potencialidades, que además con una buena gestión deberían convertir un Palacio de Congresos que es un auténtico coloso en un baluarte, según se puede comprobar si eres una de las personas que tienes la ocasión de visitar las obras. A ello lógicamente tenemos que sumar un medio ambiente increíble y una pujante gastronomía, y un enoturismo creciente que sumar a esta oferta. Solo nos falta la playa, pero París tampoco la tiene y cuenta con más de diez millones de turistas al año.

(Publicado en Diario de Burgos el 9 de mayo)

La Junta y el MEH

Este artículo es políticamente correcto. Y lo es porque voy a hablar bien de mis jefes, que en estos momentos es la Junta de Castilla y León, y lo hago porque desde hoy entran ‘en funciones’  todos los cargos públicos municipales y autonómicos. Aunque resulta curioso que es precisamente en esta situación cuando más horas supuestamente están en disposición de atender a los ciudadanos, del servicio público.

Pese a todos los problemas que puede generar la apertura de un Museo, como es el de la Evolución Humana, con la envergadura y los presupuestos que tiene, y frente a encontrarnos en una situación de crisis económica –el MEH fue levantado en época de vacas gordas, para gestionarse en momentos de vacas flacas- desde todos aquellos estamentos de la administración autonómica he encontrado no solo aliento, sino también apoyo, desde la propia Consejería de Cultura, comenzando por la titular, hasta jefes de servicio y funcionarios, la relación ha sido constante. Gracias a ellos hemos podido contar en el MEH con eventos destacados, el último de ellos la presencia del Consejo de Patrimonio Histórico, con todos los responsables de Patrimonio de las Comunidades Autónomas Españolas y del Gobierno Central. Hemos estado presentes, además, de la mano de Sotur en las Ferias más importantes de turismo y con la colaboración de todos ellos nos han visitado numerosos tour operadores, que culminarán el próximo día 14 de abril con el Mercado de Turismo que se celebrará en el  Museo y que contará con la presencia de más de 300 profesionales del sector a los que podremos ‘vender’ las excelencias no solo del Sistema Atapuerca, sino de toda la provincia de Burgos. Y como es un lujo tenerlos entre nosotros es una oportunidad que no podemos dejar pasar.

Pero el apoyo no se debe solo a la Consejería de Cultura y Turismo,  y a lo que forma parte de su obligación, sino también al mimo que han puesto y seguirán poniendo, no me cabe la menor duda, en el hermano pequeño de los Museos de Castilla y León, que en el año 2010 se convirtió en los más visitados de la Comunidad, contabilizándose solo apenas seis meses desde su nacimiento. También caminamos de la mano de la Consejería de Fomento y de la Dirección General de Telecomunicaciones, con el talento de unos cuantos, y con el deseo de convertir la próxima web en la que estamos trabajando en una referencia no solo museística, sino también innovadora, interactiva y científica, donde puedan acudir jóvenes y mayores, curiosos y expertos. Hemos contado además con el apoyo de los máximos responsables de la administración regional en Burgos y de la administración local. Y lógicamente el impulso decidido del presidente, Juan Vicente Herrera, quien creyó y alentó desde el primer momento hasta ahora este proyecto, y de todo su equipo más cercano.

Creo que en un momento de cambio y de posible ajuste en el futuro debía unas líneas a quienes han colaborado en estos primeros meses del MEH. No he puesto nombres, no hacen falta, cada uno y cada una de ellos, que son muchos, lo saben. Gracias, y seguro que nos vemos tras el 22-M. Habéis demostrado una más que suficiente capacidad de trabajo y amor por esta tierra.

Oficina de Congresos

Parece que ya se ha puesto en marcha la Oficina de Congresos de Burgos, dependiente del Patronato de Turismo, y con el objetivo de lograr atraer a esta capital numerosos eventos que se fraguan por España o por el mundo. De momento, la primera decisión ha sido un gran acierto. Una persona ha sido elegida para la gestión con experiencia (en el único Palacio de Congresos que existe en Burgos, como es el ABBA), con dinamismo y por lo que conozco, con muchas ganas de trabajar e innovar.  Sin embargo, parece que el Auditorio y Palacio de Congresos se inaugurará a finales de 2011, pero precisamente es un año antes cuando se van ofreciendo y preparando los lugares donde se celebrarán los Congresos de 2011, 2012 y años sucesivos, así que en este caso estamos a tiempo, con una infraestructura útil, con un complejo de la Evolución preparado, y con buenos accesos a la capital, pues para entonces confiamos en que estén bastante avanzados los trabajos de la A-1. Eso sí, con el gran lamento por el AVE y otras autovías, que todavía habrá que esperar años para que tengan en Burgos su punto de destino.

Pero debemos contar con lo que tenemos y seguimos siendo un nudo logístico de primerísimo plano, que hemos estado varias veces a punto de perder el tren, pero que no podemos olvidar que en poco tiempo tendremos conectada a toda la mitad norte de la península Ibérica a través de autovías o autopistas, aunque sea hacia Cantabria por Palencia. Y esto no es desdeñable. Además la provincia de Burgos –no solo su capital- presenta suficientes atractivos turísticos como para venderlos junto a los Congresos, y quizá para entonces alberguemos la buena noticia de sumar una denominación más de Patrimonio de la Humanidad, con las ignitas de dinosaurios. La no apertura del flamante Auditorio ha llevado a trasladar de lugar algunos eventos previstos para 2011, entre ellos encuentros de médicos con asistencias de cientos de personas, o de empresas e instituciones. Aquí, por ejemplo, parece que se iban a celebrar también los premios Castilla y León 2011 como cierre de legislatura, y probablemente algunos encuentros internacionales que se habían barajado. Pero no es cuestión de lamentos, sino de prepararnos mejor para el futuro y de ofrecer un servicio de mayor calidad cuando todo esté en marcha. También los hosteleros y hoteleros  -que ahora sufren la situación de las empresas, que les sirven de impulso en estos meses invernales- deberán apostar no solo con declaraciones, sino de una forma más directa y participativa, por esta Ciudad de Congresos que debería ser Burgos y que muchas otras demandan.

Por eso no debemos parar ni un segundo. Aunque Burgos no tenga una vocación turística para aumentar significativamente su PIB  –siempre hemos sido un núcleo industrial, y ojalá sigamos siéndolo y de ahí que además del Auditorio es necesario un mayor impulso al Parque Tecnológico-, sí puede ser un pilar decisivo en mantenernos en los mismos niveles de empleo de hace tres o cuatro años, donde se podía afirmar que el paro que existía era técnico. Es un trabajo entre todos, y en equipo.

Elvis

Los últimos años de la vida de Elvis Presley fueron realmente azarosos, por su renqueante estado de salud, y su adicción a las drogas. En algunas de las fotos publicadas de sus últimas actuaciones refleja sus más de 120 kilos de peso y una imagen deformada. Presley se caracterizó durante su vida musical por los movimientos de una pelvis que pasaron a la historia. Pero en 1977, el año de su muerte, a los 43 años, dista bastante de ser el muchacho lleno de energía que conquistó el mundo. Indianápolis fue el último escenario que pisó, el 26 de junio, apenas dos meses después, el 16 de agosto, fallecía en su mansión de Graceland. Fue encontrado inconsciente, y todavía sobre los motivos de su muerte se elaboran numerosas teorías. Más de doscientas mil personas han asegurado en estos años que le han visto, y algunos incluso acusan a una conspiración su fallecimiento.

Elvis también ha pasado a la historia en Atapuerca, en sus yacimientos: la pelvis encontrada a finales de los noventa, y que ahora se exhibe en el Museo de la Evolución Humana de Burgos, recibió el nombre del cantante.  Es la pelvis más famosa, y también la más antigua y mejor conservada, más de medio millón de años. Ahora hemos conocido que nuestro Elvis heidelbergensis vivió unos pocos años más que su homólogo del siglo XX, pudo llegar hasta los 50 convirtiéndose en el abuelo del clan. Y que en los últimos años de su vida tuvo que depender de los demás miembros de la tribu, todos ellos cazadores, para sobrevivir. Y además acabó arrojado, junto al resto de los miembros del grupo, hasta 28, todos más jóvenes –como Miguelón– en la sima de los huesos, el lugar del hallazgo de Excalibur.

De Elvis, el burgalés, nos han contado al inicio de la semana pasada que sufría una deformidad lumbar, desplazamiento de vértebras y artrosis, lo que suponía que los últimos años de su vida estaría encorvado y con dolores intensos. A pesar de ello logró sobrevivir hasta una edad avanzada para lo habitual en aquella época y el resto de fósiles encontrados en la Sima de los Huesos de Atapuerca.  El altruismo parece que jugó un papel importante en la vida de los heidelbergensis, precursores de los neardentales y de los sapiens. La historia de Elvis en este sentido no es la única, también el cráneo de Benjamina relata otra historia de dolor y de amor.

Como recuerda Juan Luis Arsuaga con motivo de este nuevo descubrimiento. “Por lo menos tenemos el consuelo de que no terminó sus días solo, de que no fue dejado atrás en una marcha. El viejo Elvis expiró rodeado de los suyos”.