Archivo por meses: junio 2011

Recortes

Con menos ingresos, toca echarle todavía más imaginación y marcar muy bien las prioridades. Lo han hecho, y lo han sufrido, las empresas privadas durante estos últimos años, no lo habían cumplido muchas de las administraciones, mientras se miraba hacia otro lado. Se ha precisado de unas elecciones municipales y autonómicas y un movimiento en la calle para que los responsables públicos reaccionaran. En algunas autonomías, en algunos casos uniprovinciales, como es Baleares, las empresas públicas superaban ampliamente las 200 y las Consejerías 14. El nuevo presidente insular –desconozco si por conciencia o porque no le quedaba más remedio- ha reducido las mismas a 6. Efectivamente no es lo mismo gobernar en el territorio más grande de España que hacerlo en unos miles de metros cuadrados. Ni tampoco en la Comunidad más poblada que en la menos, ni en la más concentrada que en la más dispersa. Pero los peculios no son infinitos y cuando todos somos más pobres hay que ajustarse el cinturón como en las familias numerosas. Aunque aparentemente muchas de las manifestaciones solo sirvan para la galería es cierto que si se disminuyen los centros de poder (sean consejerías, direcciones generales, fundaciones…), se distribuyen mejor los recursos, porque de principio ya hay que repartir entre menos.

Será una de las grandes enseñanzas de esta crisis a la que todavía nadie le ha puesto un final. Es claro que cuando salgamos de ella ya nada será lo mismo y la economía de subsistencia que muchos autónomos y empresas están realizando se ajustará también en tiempos de bonanza. Es evidente que ahora es el momento del cambio y de una “R-evolución” que vaya más allá de los lemas sino a las causas, muchas de ellas ancladas en una educación que ha olvidado los valores y se ha ocupado únicamente en preparar personas para ocupar ciertos puestos de trabajo. Se acabó el derroche que lo ha habido y mucho. Se acabaron las tarjetas de crédito sin control.

Pero todo ello muchas familias lo han sabido hacer a lo largo de los años. Familias castellanas que han ahorrado durante toda su vida para que ahora sus hijos y sus nietos puedan subsistir con salarios bajos o sin empleo. Ha sido la familia la que ha salido reforzada de la crisis, porque son ellas las que han aunado y han mantenido en algunas ocasiones a todo su entorno. Pero no habrá políticas de familia, de jóvenes, de mujer, de igualdad si no hay empleo, y en ello todos podemos innovar; la mayoría actuando bien en su trabajo, con honradez y profesionalidad, otros generando nuevos puestos, y algunos creando iniciativas y situando los medios necesarios. Y posiblemente sea el fin para muchos aprovechados, que haberlos haylos.

Listas abiertas, cerradas o desbloqueadas

Resulta cuando menos curioso comprobar que ha sido una presidenta de un partido de centro derecha la que ha abierto el camino abogando por las listas abiertas –desbloqueadas- en su investidura en la Comunidad Autónoma mientras que la social democracia lo cuestiona, alegando que se tiene que llegar a un consenso en todo el país. Esas, básicamente, fueron las posturas de Esperanza Aguirre y Tomás Gómez durante el debate de la toma de posesión de la primera. Al día siguiente se sumó Gallardón argumentando que no descartaría que los concejales fueran elegidos por distritos.

Bien es verdad que Aguirre pedía el consenso –sin él no sería posible ese objetivo- y no avanzaba cuál era el camino hasta los próximos comicios para lograrlo. Las listas abiertas o desbloqueadas también tienen sus dificultades, como el conteo de las mismas, pero al menos evita que las diferentes administraciones sean lideradas por imputados o por aquellos que ya tienen fama de vagos o de inútiles. Nos podemos equivocar unos pocos, pero no si el rechazo es mayoritario, salvo que alguna campaña de desprestigio –este también podría ser un problema- ponga a una persona en la picota. ¿Se imaginan si Marta Domínguez, por ejemplo, hubiera ido de nuevo en las listas del PP al Ayuntamiento de Palencia y se hubiera tenido que votar con listas abiertas antes de la solución de su caso? Se hubiera generado una duda, posiblemente razonable, y podría haber sido tachada por algunos electores, suponiendo todo ello una gran injusticia. Si no hay tampoco algún tipo de medida correctora podría asimismo beneficiar a los mayoritarios, como ocurre en Inglaterra.

Aun así creo que tienen más factores positivos que negativos. Si las listas hubieran sido abiertas en las generales de 2008 seguro que nuestros diputados y senadores hubieran perdido más el culo por su circunscripción, en concreto Burgos, que lo que han hecho durante estos tres años, que es nada o menos que nada. También posiblemente conoceríamos a aquellos que quieren ser procuradores en las Cortes de Castilla y León, ya que hubiéramos leído todos sus nombres en vez de votar exclusivamente a unas siglas. Algo que ahora se ignora, y eso que les hemos podido meter en una papeleta hace un mes. ¿Saben quién era el segundo de la lista del PP tras Herrera o el segundo tras la candidata socialista, o incluso saben quién era la número 1 en la lista del PSOE? También en las municipales, no cabe la menor duda, el efecto hubiera sido positivo, porque al menos en este caso los propios ediles saben que además de encontrarse respaldados por su partido, lo están por los ciudadanos.

Educación en las nuevas tecnologías

Son pocas las personas a las que les guste a la hora de  contestar a un interlocutor encontrarse con una persona que esconde su identidad; sin embargo, tanto en las páginas webs de algunos medios de comunicación como en ciertas redes sociales –Twitter más que Facebook-  nos hallamos con personas que se esconden en el anonimato para ejercer su crítica, en algunas ocasiones constructiva, y en otras absurda, y como en todo hay que separar el grano de la paja, pero sería más fácil admitir el ataque si quien lo hiciera aportara además de sus razones sus señas de identidad, y no un apodo o el nombre del protagonista de su serie preferida, aunque esta sea House, pero la ironía y acidez del doctor no se consigue con tanta facilidad.

Y ocurre en las redes, porque si bien en Facebook puedes aceptar a aquellos que quieren convertirse en tus ‘amigos’ en Twitter hay total libertad para convertirte en seguidor de Obama o de Hugo Chavez, y de enviarle los mensajes que estimes oportunos, aunque estos personajes no los lean, por lo que el trabajo de los troller se dirige más a los ciudadanos nacionales y locales que a los mundiales, donde ni Shakira ni Oprah Winfrey, por poner dos famosos con más de seis millones de seguidores en la red del pajarito, les dedicarían ni un segundo. Y los insultos, al menos califican al que los hacen, pero la suplantación de personalidad en algunos casos es lamentable.

Pero no es solo eso, sino que estamos perdiendo la educación en las redes. Ya no son las mínimas normas ortográficas que nos olvidamos en el SMS, sino las elementales formas, y el uso del móvil y de las Nuevas Tecnologías deberían exigir un mínimo de compostura, que todos perdemos, por ejemplo, cuando durante una reunión nos dedicamos a leer y contestar los mensajes del correo o del móvil en nuestro aparatejo cuando no pasa nada por esperar a que termine el encuentro para devolver los mismos. Es cuestión de prioridades, y de momento una persona presente tiene más que uno ausente.

Luego está la costumbre –más bien mala que buena- de tener encendido el teléfono durante las comidas, ya sea familiar o de negocios –vivimos para trabajar o trabajamos para vivir-. Si está esperando una llamada que para usted es urgente, lo mejor es que advierta a sus acompañantes, y que deje el móvil en modo silencioso. Cuando reciba una llamada urgente, que las hay, lo correcto –al menos hasta ahora- es salirse de la reunión para responderla, y si no puede, hable bajo o susurre, y no pretendamos alargar la conversación más allá de lo necesario.

Todos conocemos lo que ocurre en autobuses, trenes u otros medios de transporte, donde nos asomamos a la vida pública y privada de muchos viajeros gracias al tono y a su móvil. O en las redes sociales donde encontramos fotos de grupo de repente, sin comerlo ni beberlo. Siempre que cuelgue alguna, aunque le cueste, consulte a los que allí aparecen, o estaremos violentando su intimidad.

Las mínimas normas de educación no son de épocas pasadas, se mantienen en el tiempo, aunque algunas formas quizá haya que adaptarlas a los tiempos.

Rafael Nadal

Cuando escribo estas líneas desconozco si Rafa Nadal habrá ganado ya su sexto Roland Garros. Ha salvado, gracias a la victoria de Federer en semifinales -todo un caballero del deporte-, el número 1 del mundo. A pesar de que lo conseguido el año pasado será muy difícil que se repita en la historia del tenis, y la contabilidad de la ATP es la más complicada e ilógica del mundo.
Ojalá Nadal haya ganado a su bestia negra de este año el torneo francés porque me parece impresentable la actitud de algunas personas que cuestionan la carrera de uno de los mejores deportistas que ha tenido España a lo largo de su historia. Ha estado en los últimos 5 años alternando el número 2 con el número 1, Roger Federer; solo Miguel Indurain, nuestro Miguelón, ha sido capaz de lo mismo ganando el Tour. Acaso también Severiano Ballesteros, si bien no lo alcanzó en triunfos, sí tuvo el reconocimiento de los aficionados más experimentados. Y Fernando Alonso casi lo consigue. El piloto asturiano ya conoce las hieles de ser español, donde te coronan casi al mismo tiempo que te hunden al fondo del infierno. Es nuestro carácter. Y no me extraña que el Nano tenga en algún momento tentaciones de dar a más de uno con la puerta en las narices.
Por supuesto que Nadal admite las críticas, y también Alonso. Y no existe la menor duda sobre las pasiones que el tenista mallorquín levanta, excepto en las canchas galas. No solo por su gran juego, sino por su excelente fairplay, también por sus tics, que han entrado a fondo en el colectivo patrio. Además, es un excelente compañero al que sus rivales aprecian, y sus camaradas de la selección española que ha conducido hacia la Davis admiran.
Es cierto que no son muchos los que han comenzado a poner al tenista en el objetivo de sus dardos. Y que Nadal además de las numerosas virtudes que le adornan y cultiva suma también defectos. Pero ha demostrado a lo largo de su historia, corta, vibrante y admirable, que a base de esfuerzo y de tenacidad ha superado sus problemas físicos. Quizá no haya sido de la mejora manera, quizá en algunos momentos se hayan equivocado en su preparación o posiblemente Nadal nos haya dado en 2010 sus mejores jugadas. Pero solo con eso ya bastaría para dejar de dudar de él.