Violencia de género

No hay un día en que en las redacciones de los medios de comunicación de Burgos no llegue una notificación de la policía nacional por un detenido por malos tratos:

 Policías de la Comisaría de Burgos han detenido a J.L.F.D., de 36 años, por un presunto delito de malos tratos en el ámbito familiar. Una llamada alertó al 091 de que se estaba produciendo una fuerte discusión de pareja en un bar de Capiscol. Al llegar la patrulla, el hombre que había agredido a su expareja se había marchado. Los clientes del local evitaron males mayores. Sin embargo fue localizado poco después y detenido.

 Por idéntico motivo se ha detenido a F.S., de 32 años, que echó a su mujer de casa después llegar ebrio al domicilio.

 Policías de la Comisaría de Burgos han detenido a D.J.G., de 34 años, por un presunto delito de malos tratos en el ámbito familiar. Una llamada alertó al 091 de que un sujeto estaba agrediendo a una mujer en la calle. Al llegar una patrulla, el agresor estaba siendo sujetado por un policía local que se encontraba fuera de servicio, quien había sido testigo de los hechos. Según manifestaciones de la víctima, había mantenido una relación ya concluida con el agresor. Se habían encontrado y ella le trasladaba con su coche hasta su casa. En el trayecto, el sujeto discutió con ella y de un puñetazo rompió el parabrisas, obligándola a parar. Luego la sacó por la fuerza y la agredió repetidamente hasta que fue interceptado por el policía local. El detenido, con antecedentes delictivos por hechos de idéntica naturaleza con otra pareja anterior, pasó a disposición judicial.

 También ha sido detenido V.F.M., de 39 años. Él mismo avisó a la Policía porque tenía problemas con su mujer. Al llegar la patrulla al domicilio, reconoció haber abofeteado a su mujer, por lo que fue detenido. Además había ocasionado daños en el mobiliario después de ofuscarse por la discusión.

 Son solo algunos ejemplos acontecidos en solo dos días en la ciudad de Burgos. La media de edad se encuentra entre 30 y 40 años. Son parejas o ex parejas jóvenes por tanto. Algunos suelen tener antecedentes delictivos, pero no parece que sean mayoría. Esta cadena ininterrumpida son de malos tratos físicos, no todos han sido denunciados -la policía se persona en numerosas ocasiones porque son avisados por testigos- y psíquicos, estos son pocas las veces que se encuentran en un juzgado. No soy, ni pretendo, ser un experto en estos temas de violencia de género, en su gran mayoría sobre la mujer, el objetivo de estas líneas es que se denuncie a todos los cafres que hay por el mundo, y que si usted es testigo, por casualidad o por parentesco, de algunas de estas situaciones, también vaya a la comisaría más cercana. Si no es el único, es el principal camino para acabar con esta lamentable situación.

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...

Deja un comentario